jueves, 4 de abril de 2013


Histéricas y no tanto…

El espectáculo fue presentado en la Sala del Teatro Lux. (Excelente opción, para presentar y apreciar propuestas culturales, en la cambiante y creciente población del Centro Histórico de La Nueva Guatemala de La Asunción.) Lástima que se permita el ingreso a vendedores ambulantes a la sala del teatro y estos caminen entre los pasillos y butacas ofreciendo chicles, dulces y cigarros. La sala no es un estadio de futbol, el Teatro merece respeto.
Obra musical, decía el pequeño programa de mano, la misma encaja en teatro de revista.  La  función dio inicio dieciséis minutos después de la hora programada, muy lejos de la puntualidad y formalidad de hace un par de años, cuando la Directora Jany Campos, puntual daba el saludo de bienvenida a  los asistentes y solicitaba de cinco  a diez minutos de prórroga para empezar la función con la autorización del público asistente.
La obra comienza con pequeños parlamentos con los que se cuestionan del  porque las mujeres se vuelven histéricas… y los hombres también. Interactúan con los asistentes a la vez que los invitan a reflexionar sobre situaciones cotidianas que regularmente afectan a las féminas. Para luego dar paso a una explicación de la histeria, por medio de la Dra. Histérica (Pía Arévalo) muy buena caracterización, lamentablemente la actriz nos llevo de más a menos durante  el desarrollo de la obra y no porque no llegara al mínimo requerido. Si no porque sus compañeras  trabajaron de una mejor manera. Jen Soto presento un excelente monologo “del porque las mujeres se tardan tanto en el baño” y Rebeca Lane con su intervención supo dar las intenciones requeridas para captar la atención del público y este no le pusiera reparos al contenido del mismo. El cual era una anécdota personal, más que un parlamento formal. Ambas actrices (Soto y Lane) mantienen sus caracterizaciones durante todas las intervenciones, además de manejar un movimiento escénico aceptable. No así Arévalo, que a ratos  se pierde en el escenario.
Para dar vida a los personajes, se apoyaban  en una caja de madera en la cual van sacando la utilería necesaria para cada una de las intervenciones. Música en vivo, de manera parcial. Ya que solo la utilizan para acompañar ciertas actuaciones y no se aprovecha para las interpretaciones musicales, las cuales no se pueden apreciar por la mala calidad del sonido y por momentos una mala dicción de las actrices. La iluminación fue de mala calidad.
El cierre estuvo un poco flojo, no quedo claro el juego que intentaron hacer.
Muchas felicidades a las chicas de Trasbastidores por el interesante trabajo presentado y seguro estaremos al pendiente de sus futuras puestas en escena.




Selvin Monroy
megustaestararribateatro@gmail.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario